El otro día paseaba por aquí por allá, cuando me llegó un alo mental, un vahído de medio segundo directo al lóbulo frontal, entonces… pese a estar escuchando un medio electrojapo al máximo volumen, igual percibí un fuerte sonido en el exterior.
Tras el sonido ocupando mi sentido común, llegué a la conclusión de que obviamente era un meteorito que caía en las cercanías de Santiago. Miré hacia arriba! Y no había nada, porque… al final era solo un auto, pero lo importante es que de todo esto debemos aprender una lección, fundamentalmente, que probablemente el vahído era un expresión interdimensional que cruzó el tiempo para llegar a mi neurona auricular, que hacía prever la caída de un meteorito en algún momento en alguna parte del universo; la otra lección es que si cae un meteorito estamos perdidos o tal vez no, pero de una u otra forma no hay de que preocuparse, ya que si cae del porte de una nuez no pasará nada a menos que te caiga en la cabeza, o la otra opción es que si es de dos kilómetros, estamos perdidos, por tanto estaremos demasiado muertos para preocuparnos.
Lo otro es que el meteorito tenga kriptonita de varios colores, y a menos que caiga una nave con guagua incluida no nos salvaremos, ya que en caso de que no haya ningún superman, está comprobado empíricamente que los humanos cuando tienen poderes producto de la exposición prolongada a la Kriptonita, son más malos que el charquicán de cochayuyo… eso, (es impresionante la cantidad de i griegas que tiene esa palabra) buenomalobuenomalo chao.
Tras el sonido ocupando mi sentido común, llegué a la conclusión de que obviamente era un meteorito que caía en las cercanías de Santiago. Miré hacia arriba! Y no había nada, porque… al final era solo un auto, pero lo importante es que de todo esto debemos aprender una lección, fundamentalmente, que probablemente el vahído era un expresión interdimensional que cruzó el tiempo para llegar a mi neurona auricular, que hacía prever la caída de un meteorito en algún momento en alguna parte del universo; la otra lección es que si cae un meteorito estamos perdidos o tal vez no, pero de una u otra forma no hay de que preocuparse, ya que si cae del porte de una nuez no pasará nada a menos que te caiga en la cabeza, o la otra opción es que si es de dos kilómetros, estamos perdidos, por tanto estaremos demasiado muertos para preocuparnos.
Lo otro es que el meteorito tenga kriptonita de varios colores, y a menos que caiga una nave con guagua incluida no nos salvaremos, ya que en caso de que no haya ningún superman, está comprobado empíricamente que los humanos cuando tienen poderes producto de la exposición prolongada a la Kriptonita, son más malos que el charquicán de cochayuyo… eso, (es impresionante la cantidad de i griegas que tiene esa palabra) buenomalobuenomalo chao.
3 comentarios:
Es cierto, los humanos con poderes son terrible de malos... y pencas, por esos supermancillo con lo aweonao que es igual gana... tarado de mierda... lo otro es que el meteorito traiga unos dinosaurios arriba de repuesto por lo que mato la ultima vez... chau!!
lo otro es que el meteorito traiga más meteoritos en su interior.
lo otro es que traiga petazatas una exploción de sabor
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